A 34 años de la última dictadura militar

¡Proyecto Sur se moviliza!

Los compañeros de Proyecto Sur Lanús invitamos a todos los vecinos, organizaciones políticas, sindicales y sociales del barrio a movilizarnos a Plaza de Mayo el 24 de marzo para recordar la vigencia de la militancia de los compañeros desaparecidos, por una sociedad igualitaria opuesta a la explotación y a la injusticia social y en repudio de los militares genocidas que en 1976 con el visto bueno de empresarios, terratenientes y banqueros instauraron la ultima, y mas feroz, dictadura.

Un golpe a los trabajadores

Se cumplen 34 años del último golpe militar que sufrimos los trabajadores y la juventud y que buscaba imponer a cualquier precio el neoliberalismo en nuestro país.
Un neoliberalismo salvaje que, a sangre y fuego, había tenido su bautismo en Latinoamérica el 11 de septiembre de 1973 de la mano del General chileno Augusto Pinochet y que era promovido por personajes como Margaret Thatcher, Ronald Reagan o Helmut Kohl.
El 24 de marzo de 1976, con el aval del departamento de estado de los EE.UU., seria el turno de la Argentina.
Los empresarios y terratenientes que impulsaban el libre mercado no solo buscaban imponer sus recetas económicas si no que tenían como objetivo liquidar el alza revolucionaria del movimiento obrero y popular iniciado en nuestro país a fines de los 60 y que teniendo la lucha y la movilización como método, había conseguido los mejores convenios colectivos de la historia sindical y la participación más alta en el reparto de la riqueza por parte de los trabajadores.
Mediante la aniquilación de la resistencia popular e imponiendo el terrorismo de estado los militares establecieron un nuevo esquema económico basado en el endeudamiento, la concentración de la riqueza, la extranjerización, la desigualdad, el desempleo, la precariedad, bajos salarios y sumisión al imperialismo que aumentaría en forma astronómica las ganancias del empresariado, y cuyas consecuencias padecemos hoy día.

Lanús y la dictadura

La dictadura, , dejo un saldo de 30.000 detenidos, torturados y posteriormente desaparecidos entre los que se encontraban obreros, estudiantes secundarios, universitarios, periodistas, abogados, científicos, docentes, trabajadores estatales, militantes políticos, amas de casas, actores, intelectuales, deportistas, etc.
Entre esos 30.000 compañeros 270 nacieron, vivieron, militaron o desaparecieron en Lanús.
Nuestra Ciudad formaba parte, a través de la Comisaría 2da y la Comisaría 3ra, del denominado “Circuito Camps"(en alusión al ex general Ramón Camps) que no era otra cosa que un circuito de centros clandestinos de detención, tortura y exterminio.
Durante los distintos gobiernos militares que se fueron sucediendo en nuestro país en el periodo 1976-1983, nuestra ciudad contó con varios intendentes de facto que avalaban los secuestros y las torturas como lo fueron: Elizalde Hugo, Pérez Izquierdo Gastón, De Vicenzi Juan C, Di Lorio Roberto, Gregotti Carlos R, Rotili Jorge Pascual, Carpintero Osvaldo.


Represores de ayer y hoy

En la actualidad gracias a la presión popular de miles de militantes durante años se han logrado avances importantes en la lucha por la memoria, como fue la anulación de las leyes de la impunidad que derivaron en las condenas de reconocidos genocidas como Luciano Benjamín Menéndez, Christian Von Wernich, Cristino Nicolaides y la del tucumano Antonio Bussi; entre otros avances significativos, como el cierre de la ESMA, la investigación de los asesinatos cometidos por la AAA o el juicio contra el primer cuerpo del ejercito.
Los compañeros de Proyecto Sur Lanús consideramos importantes estos avances pero entendemos que son insuficientes ya que no garantizan el juicio y castigo a todos los responsables militares, civiles y mediáticos del genocidio de la última dictadura y tampoco aseguran la depuración de cientos de policías, militares, funcionarios y jueces que actuaron durante la misma y hoy permanecen en sus funciones o caminando libremente entre nosotros, y fundamentalmente no garantizan la cárcel común, perpetua y efectiva de los condenados.
A su vez el secuestro de julio López, en septiembre de 2006, ha dejado al descubierto cómo los grupos represivos que actuaron en la última dictadura siguen moviéndose impunemente enquistados en el aparato estatal.
Estos grupos fascistas fueron los mismos que secuestraron en 2007 al Presidente de la Casa de la Memoria de Zárate, Juan Puthod, durante 28 hs. Esta acción tuvo una metodología similar al secuestro del militante peronista Luis Gerez a fines de 2006. Cabe recalcar que ambos, como López, eran testigos claves en diferentes causas contra genocidas (Caso Patti, Campo de mayo, Tiro Federal de Campana).

Limitaciones en la política de DD.HH

El gobierno de Cristina no puede purgar a fondo el aparato del Estado porque encontraría una gran resistencia en su interior y sobre todo en la clase dominante.
Las limitaciones de la política de DD.HH del kirchnerismo no tienen otra explicación más que en los lazos que unen al estado capitalista con los represores de ayer y hoy, haciendo imposible su depuración.
Por su parte la oposición a su derecha tanto Radicales, como el PRO, la Coalición Cívica de Carrio, y los pejotistas anti-K son variantes más reaccionarias, aun más consustanciadas con el aparato estatal y que han participado en la elaboración de leyes que beneficiaron a los genocidas o bien se han enriquecido haciendo negocios de la mano de los dictadores.
Por todo esto es que sostenemos que la única forma de conseguir terminar con la explotación, la represión y la impunidad es, como bien lo sabían los compañeros desaparecidos, mediante la lucha por una nueva sociedad, una sociedad igualitaria, basada en la solidaridad y en la participación masiva de los trabajadores en el gobierno de su destino. Una sociedad que termine con todas las miserias que produce este capitalismo salvaje.
Esta es la tarea que asumimos desde Proyecto Sur Lanús.


¡30.001 compañeros detenidos desaparecidos PRESENTES, AHORA Y SIEMPRE!

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El campamento, desde nosotros...

Una vez pasado el encuentro de jóvenes de Proyecto Sur en Lujan me permito hacer un pequeño balance del mismo.

Sin duda alguna el encuentro fue un éxito, gran cantidad de jóvenes, de las distintas provincias, del conurbano bonaerense y de la capital federal, nos acercamos a la UNLU con el afán de conocernos y poder comprobar entre mates, malabares, murgas y guitarreadas, que somos un montón los compañeros que desde distintos puntos del país, estamos participando desde lo político, lo sindical, lo social o lo cultural para gestar un movimiento popular para la liberación.

Pudimos comprobar con nuestros propios ojos que somos fuerza joven, viva y transformadora. Y esta es una condición sin ecuanon para desarrollar el movimiento. Como expreso el propio Pino “Proyecto sur tendrá fuerte protagonismo de la juventud o no será”

Hablando con cada compañero se podía notar el entusiasmo de ser parte activa de este espacio emancipador, que intenta erigirse como una alternativa al bipartidismo apolillado que puso tantas veces de rodillas a la Argentina.

La oportunidad que tenemos ante nosotros, para construir dicha alternativa, es realmente enorme y no es casualidad que surja ahora y no antes.

Proyecto Sur no cae del cielo si no que se encuentra enmarcado en una coyuntura política especifica. América latina se encuentra actualmente inmersa en un proceso de fermento revolucionario como no se había visto en décadas.

Las masas trabajadoras y empobrecidas de nuestro continente, que estaban siendo brutalmente explotadas por el capitalismo en su fase neoliberal, estallaron de bronca. Esto se vio expresado claramente en las distintas rebeliones populares, levantamientos revolucionarios o llegada al poder de gobiernos de izquierda a través del voto y que despiertan el odio visceral de los capitalistas locales y del imperialismo como vemos en Venezuela, Bolivia o Ecuador.

La perspectiva de poner en pie un movimiento político de masas nunca ha estado tan clara como ahora.

Pero para que esta enorme potencialidad que tiene Proyecto Sur se materialice debemos continuar, en nuestros barrios, los debates que se dieron en Lujan. Profundizando la discusión acerca de que programa queremos, ya que es este el que determina la identidad del partido.

Sin duda esto nos ayudara a elevarnos políticamente y por lo tanto a construir mas y mejor

Considero que el encuentro de Lujan debería ser tomado como punto de partida para seguir profundizando el debate hacia el interior de nuestra fuerza en las próximas semanas y meses.

Creo que la discusión central debe basarse en que programa necesitamos o sea que identidad le damos al movimiento.

Las 5 causas expresan puntos programáticos de gran valor pero estas no pueden ser llevadas adelante sin poner en discusión el sistema capitalista en si mismo.

No hay manera de alcanzar la igualdad y la justicia social bajo el capitalismo, ya que la desigualdad y la pobreza son una consecuencia de este mismo sistema que tiende naturalmente a polarizar la riqueza en pocas manos. No puede haber igualdad ni justicia en una sociedad donde una minoría privilegiada vive la gran vida a costa del trabajo ajeno y el resto debe trabajar por un sueldo que apenas alcanza para vivir.

Lo mismo se aplica a la recuperación de los recursos naturales. Sin duda este seria un paso fundamental pero en definitiva no solucionaría la cuestión de fondo.

De hecho en varios países, como por ejemplo, México el petróleo continúa siendo estatal pero no se han podido resolver las necesidades más urgentes como el desempleo, el hambre la inflación o la falta de vivienda.

Recuperar los recursos naturales pero manteniendo las relaciones capitalistas donde la producción no esta orientada a atender las necesidades sociales si no al lucro privado no dan una solución en si misma.

Por lo tanto además de recuperar los recursos naturales y las empresas privatizadas de servicios, deberíamos impulsar un programa Socialista que incluya la nacionalización, bajo el control democrático de la sociedad , de las grandes empresas, la propiedad de los terratenientes (El 2% de los propietarios Argentinos posee la mitad de la tierra cultivable) y la banca privada, para poner la producción del país al servicio de los trabajadores y el pueblo pobre y no para que un grupo de empresarios, terratenientes y banqueros se llenen los bolsillos.

No podemos hablar sinceramente de soberanía si no arrancamos a este puñado de oligarcas la propiedad de los medios de producción o sea las palancas fundamentales de la economía para que sean nacionalizadas bajo el control democrático de la población lo cual seria una verdadera democratización de la democracia, muy distinta a la actual democracia formal donde cada uno puede decir mas o menos lo que quiere siempre y cuando los que decidan las cuestiones de fondo sean los grande empresarios y los monopolios extranjeros.

Otra de las cuestiones que se plantearon durante el debate de coyuntura política donde participo el compañero Claudio Lozano fue el tema de la democracia interna dentro del Movimiento, varios compañeros se refirieron a que se debía avanzar en este tema.

Desde mi punto de vista es un tema fundamental, que deberíamos abordar, para poder construir un movimiento plural donde puedan ser escuchadas absolutamente todos los puntos de vista y donde se lleve a la practica la voluntad democráticamente expresada de la mayoría de los militantes fuese cual fuese el ámbito (barrial, regional, provincial o nacional) y que sean las bases las que, teniendo una participación activa y permanente, discutan absolutamente todos los temas y propuestas que se vayan a impulsar para poder evaluarlas, controlarlas y rectificarlas si así lo considerase la mayoría.

También seria importante que las mesa de dirección del movimiento este compuesta por compañeros elegidos en asambleas (barriales, regionales, provinciales, nacionales) y no por dirigentes de las distintas fuerzas. Creo que esto aportaría muchísimo a democratizar el espacio. Lo cual ayudaría a no repetir fallidas experiencias pasadas del campo popular donde los movimientos se construían en torno a personalidades y no en base a la participación activa y creadora de las bases militantes.

Otro de los temas que se discutieron en la comisión fue como expandir el movimiento.

Había compañeros que proponían afianzar los espacios fundadores del movimiento (Partido proyecto Sur, PSA, Buenos aires para todos) para crecer. Otros marcaban la importancia de sumarse a un movimiento político más amplio como es la Constituyente Social impulsada por la Central de Trabajadores Argentinos.

En este sentido Claudio Lozano expreso, correctamente, que no se puede pensar en la construcción de una fuerza emancipatoria sin tener en cuenta a los trabajadores organizados.

Yo, personalmente, coincido con lo expresado por Lozano. Creo que Proyecto Sur tiene un futuro promisorio como parte de un movimiento político superador, que tenga a los trabajadores como participante activo.

Ya que los trabajadores somos la mayoría aplastante de la población (73% de la población económicamente activa) y sobre todo somos los que sostenemos el andamiaje económico y social del país (sin el permiso de los trabajadores no se mueve una rueda, no se prende una lamparita, no se abre un galpón o se enciende una computadora). Es en ese sentido que se debe considerar la perspectiva de la constituyente social para construir una fuerza capaz de transformar la sociedad desde sus cimientos y acabar así con la pobreza, la miseria y la explotación.

Claramente son muchos los temas por debatir en los próximos meses para avanzar en la construcción del movimiento político, obrero, popular y juvenil que queremos. Pero sin lugar a dudas será el intercambio fraternal de ideas sumado al entusiasmo desbordante de nuestra militancia lo que pondrá a Proyecto Sur en la primera línea de batalla contra las diferentes variantes pro patronales: los que plantean profundizar el modelo represivo de los 90 y los pseudos-progresistas que se disfrazan de nacionales y populares.


Saludos para tod@s!


Marcelo, de la Corriente Socialista El Militante en Proyecto Sur.

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Cronica del Encuentro Proyecto Sur

“Si no construimos un movimiento amplio con aliados amigos, nos vamos a quedar con nuestras solas ideas”, le advirtió el cineasta a la juventud de su partido y la entusiasmó: “Estamos formando una construcción alternativa al bipartidismo”.




Ya había caído el sol en el predio de la Universidad de Luján cuando Fernando “Pino” Solanas se paró frente a su auditorio. “Este encuentro es apenas el comienzo, pero demuestra la convicción que existe en nuestra muchachada”, disparó, coloquial. Lo aplaudieron quinientos militantes de Proyecto Sur, venidos de distintos rincones del país para el primer Encuentro Nacional de Jóvenes del partido que dirige el cineasta. La multitud de remeras verdes y rojas lo escuchó con atención mientras explicaba cómo la “ciudadanía engañada, traicionada” generó el lugar para el crecimiento del partido. “La historia coloca las circunstancias para que construyamos un espacio nuevo, y hoy todas las encuestas nos colocan entre los cuatro candidatos con mayores chances”, remarcó Solanas. Sus partidarios le devolvieron un cálido “Se siente, se siente / Pino presidente”.

El candidato cantado de Proyecto Sur hizo una advertencia: “Este espacio va a competir por la gobernación nacional, pero por ahora lo nuestro solo alcanza para servir un copetín con cuatro aceitunas”. Luego de las risas del público, continuó. “Si no construimos un movimiento amplio con aliados amigos, nos vamos a quedar con nuestras solas ideas”, sostuvo, poniéndose serio por un momento.

De abajo del escenario lo observaban con admiración cientos de jóvenes, la mayor parte de ellos del conurbano, que habían llegado por la mañana a Luján junto a un grupo nada despreciable de viejos compañeros de ruta del cineasta. Varios de ellos portaban una remera del partido, en cuya espalda se podían leer los nombres de varias empresas estatales de antaño, incluyendo las obvias referencias a YPf, Entel y Ferrocarriles Argentinos. “Si se pudo, se puede”, rezaba la leyenda.

Solanas apeló a ese tipo de voluntades. “Hace dos años parecía que todo esto era verso –continuó, visiblemente cansado–. Pero vencimos los pronósticos de quienes decían que nos íbamos a separar, o que nuestras propuestas eran románticas, y pasamos del 7 por ciento al 25 por ciento de los votos en Capital Federal.” Más aplausos.

Pino sonrió. “Estamos orgullosos”, dijo. “Lejos de haber arriado nuestras banderas, las profundizamos, y conseguimos que otros bloques progresistas de sumaran a nuestro programa”, sostuvo, en obvia referencia a los bloques del socialismo y del GEN, con los que el martes pasado presentaron una audiencia pública en el Congreso. La conclusión feliz del dirigente fue que “hoy estamos plantando el tema de la ilegitimidad de la deuda junto a veinticinco diputados”.

Más temprano, se dirigieron a la audiencia como oradores invitados Mirta Baravalle y Adolfo Pérez Esquivel. “Estoy aquí consustanciada con los jóvenes que buscan nuevos caminos”, dijo la integrante de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora. El Premio Nobel de la Paz expresó un mensaje similar. “Ustedes, los jóvenes, tienen que tomar la posta, el testimonio de una conciencia. Por favor, no vendan sus almas. Sean coherentes entre el decir y el hacer”, pidió Pérez Esquivel.

La apertura del encuentro la había dado cerca del mediodía el propio Pino, quien expresó que la nueva fuerza que comanda “tendrá fuerte protagonismo de la juventud o no será”. A su exposición le siguió la instalación de “rondas temáticas”, donde los jóvenes –unos quinientos acreditados, muchos de los cuales tenían su primera experiencia política– debatieron con distintos referentes del partido. Las más concurridas fueron las de Comunicación y Universidad, a cargo de Julio Raffo y Jorge Cardelli, donde las aulas fueron desbordadas por encendidos debates políticos.

“Lo más increíble fue encontrarse con un montón de compañeros de todos lados, personas que estaban haciendo lo mismo que nosotros pero en la otra parte del país”, dijo Facundo, que provenía del Partido Socialista Auténtico. Detrás de él, un puesto improvisado intercambiaba remeras del partido o las vendía al “popular precio” de veinte pesos. Mientras una voz en el altoparlante pedía voluntarios para pintar un mural, Facundo recordó que muchos de los presentes se vinieron “desde Mar del Plata, Mercedes, Neuquén”. También hubo una fuerte presencia de los distritos de Avellaneda y Vicente López: cada localidad había armado su propia bandera verde y la exhibía con orgullo en las paredes de las aulas.

A la tarde, agradable y ventosa, se la acompañó con malabares, guitarreadas y canciones de Mano Negra, mientras circulaban los termos y los mates. Se avistaban numerosas remeras pacifistas y anarquistas, y sobraban las referencias a la unidad latinoamericana. La mayor parte de los presentes no pasaba los veinticinco años. “El grueso de nuestros votantes es sub-30”, expresó el legislador Julio Raffo. “Si en las elecciones de la Ciudad votaban sólo los jóvenes, ganábamos cómodamente”.

En el predio frente a uno de los módulos se montaron decenas de coloridas carpas, donde varios militantes se preparaban para pasar la noche. Los demás se volvían para Capital y regresaban para el cierre. El encuentro finalizará hoy con la proyección de películas y las conclusiones finales.

Fue una jornada extensa y los organizadores estaban entusiasmados por la convocatoria. La conclusión del día la dio el propio Solanas cerca de las nueve de la noche, cuando saludó a los presentes y anunció: “Estamos formando una construcción alternativa al bipartidismo, un movimiento de carácter emancipatorio”.

Informe: Federico Poore.

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